SOCIOPATÍA, AGRESIVIDAD SIN ESCRÚPULOS

 Anteriormente hablamos sobre la psicopatía por lo que ahora es el turno de la sociopatía, una condición psicológica conocida también como trastorno de la personalidad antisocial, en general, más problemática y peligrosa que la psicopatía. Los sociópatas se caracterizan por su carencia de empatía hacia los demas, sin embargo, se diferencian de los psicópatas debido a su comportamiento. Los psicópatas crean estrategias, pasan desapercibidos y son incapaces de mantener una relacion con una persona mientras que los sociópatas actúan por impulso y si son capaces de establecer relaciones con personas.

Los sociópatas no son capaces de contener sus impulsos y suelen ser protagonistas de arrebatos de violentos y agresivos. Hay que destacar que a diferencia de la psicopatía, la sociopatía se desarrolla durante el transcurso de la vida del individuo. Los sociópatas son capaces de integrarse en la sociedad y controlar sus impulsos, a esto se le denomina sociopatía funcional. Para entender esta condición hay que tener en cuenta que la sociopatía no es una elección y eliminar todos los prejuicios hacia estas personas, las cuales pueden ser tratadas y pueden ser integradas a la sociedad. A su vez hay que entender que estas personas son muy impulsivas y pueden llegar a ser peligrosas. En todo caso, la sociopatía, pese a no tener cura, puede ser controlada mediante terapia psicológica.